02-05.2010
Maria Cecilia Teixeira
http://escritores-canalizadores.blogspot.com
A todos los Trabajadores de luz.
Es llegado el momento de actuar. La Madre Tierra sufre ahora mismo los dolores del parto. Está lista para expulsar de su vientre todas las energías que no vibren en sintonía con la 5ª Dimensión. El proceso se ha iniciado en el Atlántico Sur, en donde se verifican fuertes tormentas y vientos huracanados. Las costas de Brasil, Argentina, Chile, Bolivia y Colombia, serán particularmente afectadas.
Mientras tanto, volcanes estarán siendo activados, terremotos en muchas partes del planeta, tifones y huracanes serán sentidos en toda la Tierra. El holograma planetario de la Tierra de tercera dimensión cede su lugar a la Tierra de 5ª Dimensión. Y os necesitamos a todos, firmemente anclados en su propia Luz. No teman. Ni por si mismos – puesto que estarán protegidos en todo momento – ni por sus seres queridos. A cada habitante del planeta va a ocurrir solamente lo mejor para uno mismo y para su evolución.
La suerte esta lanzada. Recuerden que nunca estarán solos. Os necesitamos tranquilos y actuantes para auxiliar a sus hermanos. Solo así podrán apurara su oído interior y oír nuestra voz a través del corazón. Las naves de la flota de la Confederación Galáctica estarán procediendo a la evacuación de aquellos que lo deseen, o que estén en riesgo inminente. Estén atentos, hermanos, que el tiempo ha llegado. Os envuelvo a todos en amor. Yo Soy el Comandante Sohin de la Nave Alfa, y te dejo, Cecilia, con la Madre Maria, que también desea hablar.
Amados hijos.
Mi corazón de Madre se parte de dolor, al ver que muchos de mis hijos dejarán el planeta, sin enterarse de lo que efectivamente está pasando. Pero aquí estoy para apoyarles y darles fuerza en ese momento tan difícil. Confíen en la ayuda divina y que todos nosotros, desde nuestro lado del velo, estaremos a vuestro lado, inspirándoles sobre que hacer o hacia donde dirigirse. Sé que delante de una situación de crisis, no es fácil oír al corazón. Por eso, os pido que se mantengan serenos y firmemente sujetos en las manos de Dios. Sepan que nada os pasará, mis amados. Yo Soy la Madre María y os dejo envueltos en mi Manto de AMOR Y PROTECCIÓN.
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